El equipo, dirigido por Rosa Perán Quesada, ha realizado experimentos a partir de algas frescas lavadas (AL) y de algas no lavadas (ASL), que fueron posteriormente deshidratadas. De ellas, se maceraron 50 g/L de algas secas con y sin activadores durante 10 días, oxigenados manualmente dos veces al día. Los activadores consistieron en: 100 g/L de harina de garbanzo, 100 g/L de gallinaza, 10 g/L de azúcar moreno y 10 g/L de tierra fértil. Se realizaron dos diluciones de los tratamientos activadores, Rango 1 y Rango 2, que correspondían a una conductividad eléctrica entre 1,5-2 y 3-3,5 dS/m. (En la Figura 1 adjunta se observan los resultados).
(Figura1)
Se analizó la relación C/N, los principales nutrientes y el Na en las algas frescas lavadas y sin lavar, así como en los extractos preparados con los diferentes tratamientos. Además, se analizó el contenido en metales pesados de los extractos suplementados con activadores.
Para el ensayo agronómico se establecieron 10 réplicas de 10 x 9 cm por tratamiento, suministrando 50 mL de cada uno una vez por semana durante 4 semanas. Después de 5 semanas (la última sin tratamiento) se cosecharon y se analizaron las variables número y longitud de las hojas y peso fresco y seco de las raíces.
De estas pruebas se extrae positivamente que los tratamientos suplementados sólo con algas dieron lugar a una mayor longitud de los rábanos en comparación con el control y los suplementados con activadores, siendo estas diferencias significativas.
En relación a la raíz, el tratamiento de alga no lavada suplementada con activadores en el rango 1 de la CE (ASL 1 + A) resultó en el mayor incremento de la biomasa de la raíz (peso fresco y seco de la raíz).
Asimismo, los tratamientos con algas lavadas más activadores (AL + A) en ambos rangos tuvieron mayores concentraciones de calcio que los demás.
De acuerdo con el aspecto general de los rábanos de los diferentes tratamientos (Figura 2), el tratamiento ASL1 + A da lugar a una mayor homogeneidad en el tamaño y el grosor, así como a un mayor tamaño de la parte aérea y de la raíz.
(Figura 2)